ESE MONTE PUEDE SER MOVIDO

“Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.” (Mark 11:23).
¡Jesús dijo que es posible mover el monte ante nosotros, pero que eso se lleva a cabo solamente a través la fe! Él nos da la gloriosa promesa de que todo lo que deseemos, cuando oramos y creemos, lo vamos a recibir. ¿Puedes creerlo?

¿REALMENTE LO CREES?

En mis años de ministerio, he observado que muy pocos cristianos creen que se puede producir tal obra sobrenatural. De hecho, puedes decir: “He intentado esto y no funcionó para mí. Oré en fe y creí pero mi oración no fue respondida”.

Recuerdo a un pastor nuevo que vino a confesarme su adicción a la pornografía. Este joven amaba a Dios y amaba a su mujer, y disfrutaban de un buen matrimonio. Pero él se volvió adicto a la pornografía y no pudo librarse. Esto comenzó a robarle toda su fuerza espiritual, y aunque oraba fervientemente, no había sido liberado.

PLENITUD EN CRISTO

El problema de este joven no era solo una adicción, sino la incredulidad. No creía en que Dios responde a la oración, y su incredulidad se puso ante él como una amenazadora montaña, infranqueable e inamovible, y esto estaba obstaculizando gravemente la plenitud que era suya en Cristo.

La buena noticia es que este pastor llegó a una mejor comprensión de cómo ejercer su fe, resistió la tormenta, y llegó en un lugar maravilloso de victoria en el Señor.